Por: Dani Dávila
No eres la extensión de mi vida, ni de mi nombre, ni viniste al mundo a cumplir lo que yo no pude. No eres lo que yo quiero que seas, ni me perteneces.
Eres más que eso, muchísimo más…Eres la prueba de la perfección y la existencia de Dios. Eres libre para volar, libre para aprender, libre para amar. Eres y puedes ser quien TÚ quieras ser sin importar lo que el resto diga.
Yo te entrego mi amor absoluto, completo y puro. Te regalaré sonrisas en los días grises, viajes imaginarios a mundos inexistentes, tardes de pelis, días de juegos. Te regalaré mis abrazos, siempre y sin condiciones. Te regalaré mi presencia y también aunque no quisiera pero es parte de la vida, te regalaré mis errores.
Y espero que esto alcance para que vivas libre cariñito mío, lejos de ataduras, de posturas y apariencias…vive libre y sé quien tú quieras, pero siempre procura hacerlo bien.
Foto por: Sol Solecito